La llegada de un nuevo hermanito
La llegada de un nuevo hermanito es un momento de gran alegría para la familia, pero que hay que saber gestionar con los pequeños de la casa, ya que hasta ahora han sido los auténticos príncipes o princesas de sus padres. El motivo no es ni más ni menos que los celos que pueden llegar a tener, y que forman parte del proceso emocional que sentirán con la llega del nuevo bebé, al que pueden llegar a considerar como un rival.
Aunque estos sentimientos pueden aparecer desde el principio, lo normal es que con el paso del tiempo tengan más importancia. Sobre los 3 ó 4 años el hermano mayor tenderá a reclamar mayor atención de la que siente que le estáis dando. En ese momento puede sentirse un poco abandonado al no tener la atención única y exclusiva que tenía antes.
Esta situación es complicada tanto para el niño como para los padres. Por ello, a continuación os dejamos con una serie de recomendaciones que os harán más fácil este periodo.
CONSEJOS EN LA LLEGADA DE UN NUEVO HERMANITO
- Préstale atención siempre que puedas y hazle sentir que es muy querido a través de demostraciones físicas como besos y abrazos. Es recomendable también que estas situaciones se den delante del bebé, para que su hermano sienta que sigue ocupando el lugar importante que siempre ha ocupado.
- No des importancia a los arranques de celos que pueda tener, y normaliza la situación en la medida de lo posible. No le castigues por ello porque en ese caso sentiría que ha perdido el cariño de sus padres y en adelante quiera reprimir celos aún más fuertes.
- Nunca compares aspectos de los dos hermanos, ya que el mayor puede interpretar que hay cierta preferencia hacia el pequeño.
- Fomenta la autonomía del hermano mayor para conseguir que sea más independiente y no necesite de la excesiva atención de sus padres.
- Practica el refuerzo positivo hacia él con comentarios que le hagan sentirse seguro, querido y valorado. Hay que demostrarles que ésto sigue siendo así.
- Cuando los dos hermanos vayan cumpliendo años, nunca debéis participar en sus pequeños enfados. Intervenid únicamente para detener una pelea, pero nunca para buscar culpables ni decantarse por uno de ellos.
- Busca situaciones en las que los dos hermanos interactúen, se diviertan, y comiencen a crear un vínculo especial entre ellos.
- Es recomendable premiar o dar algunos privilegios al hermano mayor precisamente por su condición de primogénito. Ésto le hará sentir importante y comprobará que sus padres le siguen teniendo en cuenta de una forma muy especial.
Como véis, la llegada de un nuevo hermanito no tiene por qué ser una etapa traumática para el que hasta ahora era el pequeño de la casa. Siguiendo unos pequeños consejos los dos hermanos terminarán convirtiéndose en aliados y cuidarán el uno del otro para siempre.